Educación
La costumbre como fuente del derecho nutre a la Ley, pero en materia de igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres tenemos un marco legislativo potente que todavía no se ha hecho costumbre y no se ha normalizado en la sociedad.
Debemos mostrar la realidad de la desigualdad y de la violencia machista con datos objetivos y con ejemplos vividos muy de cerca; concienciar de la importancia de la cultura y de la educación, desde las aulas y los hogares, para poder terminar con los crímenes machistas, que en España suponen el asesinato de 60 mujeres de media al año; y también realizar una crítica a la forma de actuar la legislación española frente a estos casos.
Durante muchos años el planteamiento educativo ha forjado cimientos que, basados en la cultura del momento, han provocado desigualdades de género, a todos los niveles, condicionando la vida de las personas.
Hoy, la palabra educación, conlleva una serie de herramientas que nos va a permitir romper con la herencia social cargada de estereotipos y roles de género. Y aunque a lo largo de la historia ya se han conseguido grandes avances en la equidad de género como por ejemplo que el alumnado tenga los mismo fines y contenidos educativos, el reto continua.
Conscientes de ello, ASIES, con su trabajo, pretende conseguir mediante la educación formal, no formal e informal que las personas tengamos cabida en la sociedad por nuestras actitudes, aptitudes, virtudes, y defectos individuales, no por sexo.
En este largo recorrido la educación va a jugar un papel importante al ser la herramienta vital, no solo para educar a las generaciones nuevas, sino para ayudar al resto de las generaciones a adaptarse a un cambio social que, contemple una vida donde la igualdad de oportunidades forme parte de nuestra educación social.
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